LA “CONSPIRACIÓN” GANA LAS ELECCIONES
Resulta que la
numerología de este año 2016 es el número 9, este número representa el eslabón
final de un largo ciclo que culmina.
Como si se tratase de un
final de curso, el cuál comenzo el año 2008, y que se manifiesta ahora, nueve
años después, como un periodo donde estamos a punto de “licenciarnos” como
experimentados Seres que han logrado, de muchas formas, conectar con lo que
siempre ha estado, estuvo y estará ahí.
Avanzamos a pasos agigantados
y reafirmamos nuestro aprendizaje, cada vez más sólido y tangible, en esta
realidad 3-D que comienza a fusionarse con otras realidades alternativas,
creando puentes de conocimiento desde un futuro que ya está aquí, y que podemos
ir aplicando a tiempo real.
Sabemos que, en un espacio cuántico que todos
compartimos, la información vuela y se une en campos mórficos que operan en ese
umbral, desde donde verdaderamente se CREA LA REALIDAD.
En este “final de curso”,
hemos llegado a identificar los barrotes que construyen la trama de la matriz
holografica, y estamos en la disposición, ética y moral de reactualizar el
significado de la palabra “democracia”, poniéndola de una vez por todas en su
sitio.
“DEMOCRACIA: Sistema absoluto de control
donde la gente ratifica cada 4 años su contrato con la esclavitud”.
Siempre ha existido un
porcentaje de abstención en todas las elecciones.
Por otro lado, la noción que se
ha tenido sobre la naturaleza de este grupo, ha sido siempre ambigua y
tergiversada, metiendo en el mismo saco a “pasotas de la política”, reticentes
con los programas y candidatos o, simplemente, atribuido a la desidia personal.
Pero tanto ese “pasotismo”
como esa “desidia”, obedecen sin duda a una MANIFIESTA AUSENCIA DE CONFIANZA E ILUSIÓN, en la oferta programada
habitual de cualquier “país democrático al uso”, todo hay que decirlo.
En última instancia y según
la propia definición del término desde su estudio científico, se dice que, la
abstención, “cuando trasvasa los límites de la decisión individual para
convertirse en un movimiento que promueve la inhibición participativa, o
abstención activa, con el objeto de hacer pública la oposición al régimen político o al sistema de
partidos, toma la forma de abstencionismo de lucha o beligerante”. Es
decir, dentro de su propia naturaleza, la abstención supone un frente activo
con respecto al sistema instaurado; detalle que los medios de control obvian o
esconden, jugando y distrayendo al personal, y sabiendo muy bien que ABSTENERSE
ES, EN CUALQUIER CASO, LA OPCIÓN MÁS
DEBILITANTE PARA EL SISTEMA.
Todos los presidentes
electos, lo primero que hacen, es dar las gracias por “la participación”, independientemente del color del voto, porque
bien saben que de esa participación, depende la buena forma del “SISTEMA”.
La buena forma del sistema,
se encuentra cimentada en la absurda idea de hacerle creer al pueblo que
participa de algo, cuando tan solo se le ofrece la posibilidad de votar cada
cuatro años, para elegir un programa vendido a intereses infrahumanos, es
decir; económicos, bélicos, energéticos, industriales, comerciales o, en
definitiva, votar, cada 4 años, a aquel gran maremágnum que compra las almas de
los que se prestan como SERVIDUMBRE Y ELITE, a cambio de todo un sistema de
control, que mantendrá al pueblo lo suficientemente anestesiado, con infinitos
caramelos, para seguir alimentando a esa bestia descarnada que, hasta ahora, no
tenía ni freno, ni encontraba fin.
Es entonces cuando la
democracia, en sí misma, es utilizada como una religión, o cualquier
exo-energía alienante que se manifiesta capaz de lo imposible: Dominar a la
población bajo la hipnosis de una libertad de diseño, mientras dicta las reglas
del juego completamente al margen de los intereses reales de, ahora sí, vamos a
nombrarlo como novedad, “EL SER HUMANO”.
En este sistema-trampa, cabe
de todo: Los desahucios, la injusticia social, la limosna en forma de empleo
esclavo, el desempleo y, más allá, UN SISTEMA DE ENFERMEDAD PROTEGIDO Y
ASISTIDO POR LA IGNORANCIA Y LA COSTUMBRE; Una realidad dominada por el miedo
llevado a su máxima expresión, a través de la exaltación, prensa y propaganda,
de esa palabra tan común en nuestras sociedades; “TERRORISMO”.
Vemos claramente como no es
solo el miedo lo que se publicita y propaga; ES EL TERROR.
Las democracias acostumbran,
también, como todos sabemos, a crear todo tipo de acuerdos de extorsión para
con los ciudadanos. Es habitual la participación “democrática” en panoramas
bélicos internacionales, normales las operaciones fraudulentas de todos los
tipos y, cómo no, la disposición desnaturalizada del ejercicio del poder a su
antojo, diezmando países enteros y rindiendo las almas de un pueblo
adoctrinado, dormido, vilipendiado, temeroso y mudo ante las CORPORACIONES. Que
a estas alturas todos sabemos que son las que dominan el mundo, dirigen las
democracias y están por encima de los derechos más elementales del personal.
· SOBRA DECIR,
QUE TODO ESTO OCURRE SIN LA MÁS MÍNIMA PARTICIPACIÓN DEL CIUDADANO.
· ESO, ES LO
QUE LLAMAMOS DEMOCRACIA.
· ESO, ES A LO
QUE LA GENTE, VOTA.
Y ese es el absurdo donde, en
el año 2016, podríamos decir que nos encontramos...
Pero no del todo… PORQUE UN
GRUPO MAYORITARIO DE LA POBLACIÓN, DE TODO ESTO, NO HA PARTICIPADO. Porque
sencillamente, NO-HA-VOTADO.
La abstención electoral, se ha manifestado como una
declaración independiente, sólida y bien definida.
La abstención, supone una
verdadera alternativa POLÍTICA que representa, en sí misma, aquella posibilidad
de un verdadero CAMBIO; mucho más acorde con las REALES necesidades del SER
HUMANO.
Dejemos de nombrar al SER
HUMANO como números, como “población”, “ciudadanía”, circunscriptores o meros
votantes, que ya ha sido suficiente la “mágica” desaparición de este término,
cuando de decidir nuestro futuro se trata.
¿De dónde proviene la estúpida idea de que la
abstención NO REPRESENTA UNA OPCIÓN POLÍTICA?
¿Hasta qué punto nos han manipulado que ni siquiera
somos capaces de ver la puerta de salida?
ABSTENERSE, entraña la fuerza motriz de una decisión
consciente, e incluye el acto MANIFIESTO de una opción COMPLETAMENTE DISTINTA a
la oferta acostumbrada.
Tengamos en cuenta ahora a los VERDADEROS RESULTADOS
ELECTORALES:
De los 35.104.986
españoles convocados a manifestar su postura política:
Con 5.189.333 manifestaciones a su favor, Podemos,
queda consolidado como la cuarta
fuerza política en España,
con 5.530.693 manifestaciones a su favor, El PSOE, se consolida como la tercera fuerza política en España.
con 7.215.530 manifestaciones a su favor, El
Partido Popular, se consolida
como la SEGUNDA fuerza política en España.
Y con 9.280.429 manifestaciones a su favor, y
por lo tanto con aplastante mayoría, la Abstención, , se consolida como PRIMERA FUERZA POLÍTICA EN
ESPAÑA,
Por descontado y para ir
integrando los verdaderos resultados, tendremos que cambiar la óptica
acostumbrada, y mirar las cosas como son, y no como parecen, debido al velo de
manipulación al que nos tienen acostumbrados.
Esta mayoría, representada
por cerca de 10 MILLONES DE PERSONAS,
que se han aglutinado en una fuerza bien definida, deben contar también en el
consciente colectivo, si adquieren su propia representación a través de la toma
de conciencia de su –hasta ahora- ignorada existencia; PORQUE TAMBIÉN EXISTEN, e incluso tienen nombre y apellidos.
Poco más se puede añadir. Quiero, si decir que mi NO VOTO es porque me he sentido insultado constantemente por la casta política de este país, despreciado por la política sin alma, la llaman neoliberal...tan lejos les he sentido de nosotros "el pueblo" que se que son el problema no la solución y por ello mi NO VOTO a este juego impune e inhumano.
ResponderEliminarExcelente análisis!!! Muchas gracias!!!
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